Poeta, dramaturga, novelista, actriz, diseñadora y bohemia inglesa (aunque luego se nacionalizó estadounidense). Sus trabajos bebieron de todas las vanguardias de principios del siglo XX. En París formó parte del círculo de Gertrude Stein, fue amiga de Djuna Barnes y frecuentó el salón literario de Natalie Barney (Loy es Patience Scalpel en "El almanaque de las mujeres", la obra que Barnes dedicó al círculo de Barney), en Roma se relacionó con el futurismo, con Papini y con el propio Marinetti, en Nueva York se integró en el grupo que se formó alrededor de la revista Others que incluía a Man Ray, William Carlos Williams, Marcel Duchamp y Marianne Moore, fue amiga de Ezra Pound y Tristan Tzara. Aunque muy influenciada por los futuristas, estos también sirvieron de alimento a sus sátiras contra el machismo del movimiento. En muchas ocasiones ha sido calificada de una modernista menor olvidando toda su obra en otros movimientos.
No hay vida ni muerte,
sólo actividad,
y en lo absoluto
no hay mortandad.
No hay amor ni deseo,
sólo tendencia a
Quien quiera poseer
es una no entidad.
No hay primero ni último,
sólo igualdad,
y quien quiera dominar
es uno más en la totalidad.
No hay espacio ni tiempo,
sólo intensidad,
y las cosas dóciles
no tienen inmensidad.
Una mujer anciana
El pasado se aparta
vagan acontecimientos
el futuro es una vaina sin semillas
el presente dolor. Ni siquiera la pena tiene aquella precisión
con la cual golpeó en la juventud. Años como polillas
corroen los órganos internos
colgando o cayendo
en un armario estropeado. ¿Tu espejo te confunde?
¿O es lo imposible
posible para la senilidad? ¿Cómo podría el antiguo
ágil y delgado yo
aquella silueta estrecha
venir a contener
esta incógnita enorme
esta abultada forastera
sólo para ser exorcizada por la muerte? La dilatación ha dominado
por completo tu larga realidad.
Songge Byrd
Para Isadora Duncan
Ave canora empujada por el escándalo
volaste sobre los hombres
los acariciaste
con las pumas de tus ojos
mirando sin la censura de la sorpresa
que como a ti
hizo descender de los cielos
a tantos dioses.
Traducción de Esther Sánchez-Pardo
Mis pies
Golpean las losas
Que son restos de tu caminar
El viento me llena los pulmones y la nariz
Con la suciedad de la calle blanca
Pájaros enloquecidos
Prolongando el vuelo hacia la noche
Sin nunca llegar
Varan voces en los confines de la pasión
Deseo Sospecha Hombre Mujer
Se concilian en la húmeda carnicería
La carne de la carne
Extrae el deleite indisoluble
Que atrapa besando entre jadeos
Será cierto
Que te he apartado
Intocable en tu cristalización absoluta
De todos los empujones de la multitud
Me enseñaron de buena gana a vivir para compartir
O serás tú
Solamente la otra mitad
De la necesidad de un ego
Que fustiga el orgullo con compasión
Hasta el superficial sonido de la disonancia
Y el estampido del aliento en fuga.
Traducción de Isabel Castelao
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on 08 marzo 2013
at 20:38
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