Hacía tiempo que este anuncio lo veía en la TV. La verdad es que nunca le presté la más mínima atención. Hasta ayer y tras escuchar una noticia que poco tenía que ver.
Usain Bolt acaba de batir el record del mundo de 100 metros lisos. Es el hombre más rápido de la historia. Su hazaña ha sido correr 100 metros en 9.58 segundos. No me imagino el esfuerzo muscular y cardiaco que eso supone, pero tiene que estar en el límite y sólo algunos superdotados pueden soportarlo. Su velocidad: 37.58 kilómetros a la hora y sólo durante algo menos de 10 segundos.
Pues, una enciende la TV, se compra por teléfono este aparatito y todo lo anterior será una minucia. Escuchad el vídeo:
10 minutos en el aparato equivalen a una hora de carrera a 60 kilómetros a la horaAhí es nada. Diez minutos moviendo el culo equivalen a estar un tiempo 360 veces superior al de Bolt corriendo a una velocidad que casi duplica la que él consiguió (no olvidemos que un corredor de maratón tarda algo más de 2 horas en correr unos 40 kilómetros y bien sabemos cómo llegan a la meta). Y dicen que sin hacer nada, vamos, que sin esfuerzo muscular ni cardiaco. Y Bolt y los médicos sin enterarse.
Está claro que a estos publicistas se les ha ido la olla con sus tonterías y el anuncio es un tristísimo exponente del analfabetismo matemático tan brutal que tenemos.
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on 17 agosto 2009
at 14:43
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babayada
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