Alasdair Gray - "La propagación de Ian Nicol"

Posted by La mujer Quijote in ,

El cuento pertenece a "Historias inverosímiles, en general" publicado en 1983.
La versión es la de Marcelo Cohen.
La ilustración es del propio Alasdair Gray.

Un día Ian Nicol, de oficio remachador, empezó a dividirse en dos por el medio. El proceso comenzó con una zona de calvicie en la nuca. Estuvo una semana untándosela con restaurador capilar, pero seguía creciendo y la superficie se volvió curiosamente rugosa y tan desagradable a la vista que al final fue a ver a un médico.
—¿Qué es?
—No lo sé —dijo el médico—, pero parece una cara, ¡ja, ja! ¿Cómo se siente en estos días?
—Bien. A veces tengo un dolor agudo en el pecho y el estómago pero sólo por la mañana.
—¿Come bien?
—Por dos.
El médico lo aporreó por todas partes con el estetoscopio y dijo:
—Le haré varias radiografías. Y quizás tenga que consultar a algún especialista.

Durante las tres semanas siguientes la zona de calvicie se agrandó aún más y la evidencia de que tenía rostro se acentuó claramente, Ian fue a ver al médico y en el consultorio encontró a un especialista examinando las radiografías a trasluz.
—No hay duda, Nicol —dijo el especialista—. Usted se está dividiendo en dos por el medio.
Ian se quedó pensando.
—No es corriente, ¿verdad? —preguntó.
—Uf, más de lo que usted cree. Entre las bacterias y los virus es muy común, aunque no tanto entre los remachadores, claro. Le sugiero que vaya a un hospital, así el proceso se completará sin molestias para su mujer y sin incomodidad para usted. Piénselo.
Ian lo pensó e ingresó en un hospital donde lo pusieron en una pequeña sala, atendido por una enfermera, porque al especialista le interesaba el caso. Cuanto más se desarrollaba la división, más especialistas eran convocados a ver lo que pasaba. Al principio Ian comía y bebía con una avidez que dejaba atónitos a los testigos. Después de tres días de consumir por tres hombres de su tamaño entró en un coma que se prolongó hasta que terminó la división. Los lóbulos cerebrales se separaron paulatinamente y en el medio se formó un tabique de hueso. A la cara de la nuca le crecieron pestañas y mandíbula. Lo que al principio parecía un cáncer de corazón se convirtió en otro corazón. La columna vertebral se duplicó entre convulsiones. Perplejos, los especialistas estudiaban los gráficos del proceso y discutían la causa. Un especialista alemán dijo que la vida misma se estaba liberando de las vicisitudes de la reproducción sexual. Un psiquiatra dijo que se trataba de una forma de esquizofrenia; un psicoanalista, que era un proceso normal de gemelización, retrasado por un caso grave de rivalidad fraterna prenatal. Cuando se acabó la división, en la cama había dos flacos Ian Nicols.

El rencor que sentían el uno por el otro no estaba previsto, y no se habían tomado precauciones. Al Ian Nicol original se lo reconocía por la posición (estaba acostado a la derecha en la cama), pero en cuanto tuvieron fuerzas suficientes para caminar, los dos reclamaron como propios la partida de nacimiento, el carnet del sindicato, la ropa, la mujer y los beneficios de la Seguridad Social. Un día empezaron a pelearse en el parque del hospital. El combate fue muy equilibrado y hay opiniones contradictorias sobre quién ganó. Cuando salieron del hospital cada uno inició acciones legales contra el otro por robo de identidad. El caso se resolvió mediante un examen médico que mostró que uno de los dos no tenía ombligo.
El segundo Ian Nicol cambió de nombre por escritura legal y ahora se llama Macbeth. A veces se escribe con Ian Nicol. La última novedad es que cada uno tiene una zona calva en la nuca.

This entry was posted on 23 junio 2013 at 20:29 and is filed under , . You can follow any responses to this entry through the comments feed .

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